En ruta
Haz las maletas, nos vamos de viaje tras los pasos del Papa Luna. Su proyección internacional es enorme, el legado que dejó en importantes capitales europeas lo pone de manifiesto. Aquí trazamos un recorrido que une varias localidades vinculadas a Benedicto XIII. Cada una de ellas merece una visita. Son muy distintas entre sí, ofrecen indudables atractivos turísticos, albergan la herencia de nuestro protagonista.
Illueca
Pedro Martínez de Luna pasó parte de su vida en la residencia familiar, el castillo de Illueca. Este edificio formaba parte del patrimonio de su familia materna, la casa de Gotor. No obstante, al pasar a manos de los Luna fue conocido como el castillo-palacio de los Luna.
Esta fortaleza fue construida en el siglo XIV sobre el cerro más alto de la villa. Durante los siglos XVI y XVII el castillo sufrió diversas remodelaciones. A mediados del siglo XVI, Pedro Martínez de Luna introdujo nuevos elementos que otorgaron al edificio un aspecto de palacio renacentista.
En 1931 edificio fue declarado Monumento Histórico-Artístico y en 1985, Bien de Interés Cultural. En 1981, la familia Bordiú-Nava cedió su propiedad al Ayuntamiento de Illueca.
Actualmente en estas instalaciones se encuentran varios espacios originales que pueden ser visitados, una hospedería y la sede administrativa de la Comarca del Aranda.
Sabiñán
El cráneo de Benedicto XIII se encuentra en Sabiñán después de 21 años desde su sustracción, en el año 2000. Se puede visitar en la capilla de Santa Ana del palacio de los Condes de Argillo de esta localidad perteneciente a la comarca Comunidad de Calatayud. Se trata del lugar donde se encontraba desde hacía dos siglos. El cráneo ha regresado a Sabiñán procedente del Museo Provincial de Zaragoza (donde se encontraba desde 2006 custodiado por el Gobierno de Aragón). El cráneo está declarado hoy Bien de Interés Cultural.
Peñíscola
Perdidos todos sus apoyos, Pedro de Luna se recluyó en el castillo de Peñíscola. Sus últimos años se desarrollaron prácticamente en soledad. Cada vez recibía menos visitas y noticias del exterior. La falta de recursos económicos y apoyos políticos le dificultaba mantener la exigua corte que le acompañaba en el castillo. En noviembre de 1422, Benedicto XIII nombró a cinco cardenales para que designasen a un sucesor una vez llegara su muerte. Falleció en mayo de 1423, en el castillo de Peñíscola. Tenía 95 años. Los restos mortales de Benedicto XIII reposaron en la basílica del castillo hasta 1430, cuando fueron trasladados a Illueca.
Peñíscola e Illueca estarán siempre unidas, en un viaje de ida y vuelta, siguiendo la estela de la increíble figura del Papa Luna.
Salamanca
Creó la Facultad de Teología de la Universidad de Salamanca, institución a la que siguió beneficiando posteriormente durante su pontificado. En esa misma ciudad también creó el Colegió de San Bartolomé.
Avignon
Para comprender la importancia de esta bellísima localidad francesa hay que remontarse al Cisma de Occidente. La iglesia católica estaba dividida en dos sedes papales: una en Avignon, Francia; y otra en Roma. En 1377 y tras la muerte del papa Gregorio XI, la sede francesa eligió como nuevo papa a Clemente VII mientras que la sede italiana se decantó por Urbano VI. Don Pedro de Luna, el «Papa Luna», fue fiel consejero y seguidor de Clemente VII por lo que tras el fallecimiento del papa elegido por la sede de Avignon, fue el aragonés quien ocupó su cargo pasando a ser conocido como Benedicto XIII desde 1394. Mientras en Roma, Urbano VI dejó paso a Bonifacio IX.
Entre los años 1308 y 1377 los papas de la Iglesia católica se vieron obligados a residir en la ciudad de Aviñón. Este cambio de ubicación de la Santa Sede tuvo su origen en el enfrentamiento surgido entre el rey de Francia Felipe IV y el papa Bonifacio VIII.
Avignon fue residencia papal durante el pontificado de siete papas. El último de ellos, Gregorio XI, intentó devolver la sede pontifica a la ciudad santa. Sin embargo, su muerte impidió que lograse su cometido, iniciándose el llamado Cisma de Occidente.
Benedicto XIII fue coronado Sumo Pontífice el 11 de octubre de 1394.
Saint Andrews
La proyección y presencia internacional del Papa Luna es indudable. Buena muestra es la universidad escocesa de St. Andrews. Benedicto XIII otorgó a la ciudad una Bula Papal para fundar su universidad, con más de 600 años de vida. Junto al castillo de Edimburgo recibe más de 2.000.000 de visitantes al año. En la actualidad, St Andrews University es, junto a Oxford y Cambridge, uno de los centros de enseñanza más prestigiosos de Gran Bretaña, con estudiantes procedentes de 87 países de los cinco continentes.